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Es posible que los usuarios de computadoras no se den cuenta hasta que llegue el momento, pero una de las peores cosas que podría sucederles a sus sistemas es que sus datos se vuelvan inaccesibles. Hay muchas maneras en que esto podría ocurrir: robo, fallas de energía, derrames de líquidos y la más notoria de todas, el daño del almacenamiento. Los datos dañados significan que los archivos en cuestión de repente se vuelven inutilizables. Ya sea que se trate de fotos memorables o archivos clasificados, ¡hacer copias de seguridad de tus datos es una necesidad!
Si no has hecho con anterioridad una copia de seguridad de los archivos seleccionados, la primera vez puede tomar un poco más de tiempo dependiendo de la cantidad de datos que desees almacenar. Pero una vez que te quites de encima el mayor número de cosas, las copias de seguridad periódicas pueden convertirse en una tarea bastante sencilla. Queremos compartir contigo algunos consejos de copia de seguridad del sistema simples pero eficaces que esperamos hagan la tarea mucho más fácil. ¡Entremos en acción!
1. Decide qué datos necesitan copias de seguridad
Cuando se trata de decidir de qué hacer una copia de seguridad, lo primero que se piensa es en el trabajo o en los archivos personales. Estos podrían incluir fotos, videos y documentos que, si están dañados, podrían ser imposibles de reemplazar. También puedes tener la opción de hacer copias de seguridad de aplicaciones, programas y configuraciones del sistema de los cuales desees conservar una versión. Todo esto, a su vez, hará que tu mente se sienta tranquila, y si algo le llegara suceder a tu sistema, tendrás una versión actualizada al alcance de la mano.
2. Planificación
Si siempre deseas tener las versiones más actualizadas de tus archivos, ¡entonces una buena planificación es imprescindible! El patrón de tu plan dependerá mucho de lo que te gustaría respaldar. Si se trata solo de archivos personales, entonces se necesitaría un plan de carga menos regular debido al menor volumen de datos creados por mes. Por otro lado, una copia de seguridad de archivos del trabajo tendría que actualizarse con más frecuencia. Dependiendo de tu carga de trabajo, te recomendaríamos una copia de seguridad diaria o semanal. Consulta nuestra guía sobre cómo configurar y programar copias de seguridad automáticas en Windows y MacOS.
3. No te limites a una copia de seguridad en la nube
La nube es probablemente una de las formas más fáciles de hacer copias de seguridad de los datos, especialmente cuando se habla de teléfonos y sistemas informáticos. Este sistema de recopilación de datos se puede automatizar, lo que hace que sea fácil para el usuario. Aunque esta es una buena manera de hacer copias de seguridad de tus datos, esta no debería ser tu única opción. Las empresas de almacenamiento en la nube pueden ser hackeadas, y con cada vez más frecuencia hemos visto que las condiciones y los acuerdos de la cuenta pueden cambiar, lo que podría poner en riesgo tus archivos. También, una suscripción mensual podría resultar más costosa que si el usuario comprara un dispositivo de almacenamiento externo.
4. Automatización
Las copias de seguridad automáticas requieren un esfuerzo mínimo, lo que es increíblemente útil en el mundo de hoy. Es fácil de configurar en la nube y puedes elegir la frecuencia con la que deseas actualizar con tus archivos guardados. También hay una opción para usar el mismo proceso en tus dispositivos de almacenamiento externo a través de algunos programas en tu sistema, estos pueden incluir Windows® Backup/File History y macOS® Time Machine. Todo lo que necesitas hacer es escribir ‘backup’ a la barra de búsqueda y leer las instrucciones si lo deseas.
5. 3-2-1 Teoría de respaldo
Esta regla se basa así, en la teoría de que tienes tres copias de sus archivos, almacenas dos copias en diferentes dispositivos (ya sea la nube o el almacenamiento externo) y una copia en una ubicación segura, como una caja fuerte o fuera del sitio. Para algunas personas, esta teoría podría sonar un poco exagerada, pero si algo les sucediera a tus copias de seguridad, ¡te lo agradecerías!
6. Eligiendo de la unidad externa correcta
Al elegir el dispositivo externo adecuado para tus copias de seguridad, debes pensar no solo en la capacidad, sino también en la durabilidad y la velocidad del dispositivo. Los discos duros externos (HDD) son una opción a buen precio para grandes cantidades de datos y pueden tener grandes velocidades, pero si se caen o se extravían, su interior se dañará y potencialmente, esto hará que algunos datos sean imposibles de recuperar.
Los SSDs externos se ven como una versión ligeramente más cara del HDD, pero vale la pena comprarlos si estás abierto a gastar un poco más. Son más duraderos, más rápidos y normalmente mucho más pequeños que los discos duros, lo que los hace más portátiles. La unidad de estado sólido externa XS2000 USB-C de Kingston es una excelente opción para copias de seguridad personales o de trabajo, ya que con velocidades de lectura de hasta 2.000 MB/s, escritura de 2.000 MB/s{{Footnote.A59013}} y capacidades que van desde 500 GB a 2 TB{{Footnote.A13848}}, hay una especificación que se adapta a las necesidades de cada usuario. ¡Es un USB 3.2 Gen 2x2 que reduce el tiempo de espera para transferir datos de un dispositivo a otro!
Si deseas algo más seguro para proteger sus archivos confidenciales, el SSD externo Kingston IronKey Vault Privacy 80 está certificado FIPS 197 con encriptado basado en hardware XTS-AES de 256 bits. La pantalla táctil a color permitirá una opción de múltiples contraseñas (Admin y Usuario) para garantizar que tus datos estén protegidos en todo momento.
Si comprar un SSD no es lo tuyo, Kingston también ofrece una gama de opciones de almacenamiento para satisfacer tus necesidades, como unidades flash USB, tarjetas de memoria SD y microSD. Un almacenamiento confiable para fotos personales, música, videos y documentos que mantienen tus archivos seguros y accesibles.
Al elegir el almacenamiento adecuado y seguir estos sencillos consejos, ¡tus procesos de copia de seguridad serán muy fáciles!
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